Se refiere a la intervención ante comportamientos que interfieren con el bienestar, la convivencia o el desarrollo funcional de una persona y su entorno.
No se trata solo de “corregir” la conducta, sino de comprender su causa, ya que muchas veces estas respuestas son la forma en que una persona expresa frustración, incomodidad, dolor o dificultades en la comunicación.
A través de estrategias individualizadas, trabajo con la familia y acompañamiento terapéutico, se busca:
El objetivo desde la terapia ocupacional es modificar las conductas desde el respeto, la comprensión y la intervención positiva, fortaleciendo así la participación y el desarrollo integral de la persona.